PARQUE NATURAL DE SOMIEDO
POR MAITE Y JAVIER
Sábado 22 de enero de 2011, el día no amanece muy católico, pero tenemos gana de marchuca, yo ando con catarro, será la vejez ya que dentro de tres días me cae un añín más, pero con eso y con todo garramos la maleta, la mochila, les botes y pal monte como les cabres.
A medida que nos vamos acercando a Somiedo el tiempo va cambiando y se ve el sol en lontananza aunque el frío se va marcando en el termómetro del coche.
Como ya es característico en nosotros llegamos pronto a Pola de Somiedo y lo primero a lo que atacamos ye la Oficina de Información para que nos abastezca de folletos. En esta época del año lo que no esta de vacaciones, está cerrado ó en obras, así que después de la explicación de la informadora damos una vuelta y comprobamos que ni bares, ni camping, ni hoteles ni na de na está abierto, conclusión lo mejor ir a la tienda y comprar provisiones para la excursión del día siguiente ya que el domingo no abren.
Una vez pertrechaos, vamos para una ruta que nos recomiendan y que está cerca de Pola, es la Ruta de Castro o P.R. AS-13
Inicio y fin: Área Recreativa de La Malva
Distancia: ±8 km (ida y vuelta)
Dificultad: Ninguna
Terreno: Pista
Señalización: Buena
que nos lleva hasta el pueblo de Castro. Nosotros arrancamos poco a poco ya que el camino está helado y haber si nos zampamos.
Al poco de empezar la ruta nos encontramos con el Área Forestal de la Malva, está cerrada con una portilla y nosotros “temerosos de Dios que somos” no entramos y seguimos hasta encontrar un paredón en el que se aloja la Cueva de la Malva
y frente a la cueva se nos abre un bonito paisaje con la Sierra de Llampaza, en la que se distingue el Pico Gurugú y La Cueva de Moros
justo debajo y metida entre la vegetación está el Embalse y la Estación Hidroeléctrica de La Malva
un edificio de principios del siglo XX en perfecto estado de conservación y que aún alberga maquinaria de la época nazi.
El sol ya empieza a asomar por encima de los picos y como hace un poco de frío hay que aprovechar y como les lagartijes ponerse a calentar
En la ruta no solo hay corredores de montaña que vienen a entrenar en ese tramo, sino que también empiezan a proliferar los cazadores, que estaban aparcados en el área recreativa, cosa que pone un poco nerviosa a la mi PRINCESA, por lo que decidimos dar la vuelta, aunque no sin antes contemplar un espectáculo que una goma de agua para el ganado pinchada y la baja temperatura nos brinda en un bardial
Acabamos la ruta y volvemos a Pola de Somiedo ya que todavía no tenemos donde dormir y hay que ir buscando algo. Lo único que topamos abierto es el Hotel El Meirel al que en un principio entramos a tomar un caldín y entrar un poco en calor, y en el que acabamos reservando una habitación con desayuno por 50 €, el caldo estaba cojonudo, así que lo demás estaría igual
y la verdad que lo estaba.
Con la carrerilla que habíamos cogido quedamonos tamién a comer, y menos mal que lo decidimos pronto porque deseguida se puso el comedor llenu y no me extraña por como taben les fabes, la carne guisada, la mousse de limón y una crema de no me acuerdo que, todo comida casera que estaba cojonuda ó más allá.
Con esta fartura enriba el llombu no se nos ocurre otra cosa más que garrar la carretera y tirar p’al Alto de la Farrapona, la carretera aunque con buen asfalto desde Saliencia tien lo suyo de curves
y también tien sorpreses como ver un zorro cruzando delantre nuestro y metese entre los árboles, cagun su manto no me dejo facei una fotuca y les cunetes que tan toes xielaes.
Aunque to merez la pena cuando llegues arriba y topeste con esti paisaje
Sin más demora calzamos les botes y con 8 grados bajo cero que marcaba el termómetro del coche arrancamos a ver como tan los lagos.
Inicio y fin: Aparcamiento del Alto de la Farrapona (1708 mts)
Distancia: En función del tramo que se realice
Dificultad: Baja-Media
Terreno: Pista
Señalización: Buena
Na más arrancar ya pisamos nieve ó mejor dicho xielu que ye lo que hay en tol recorrido por la baja temperatura, y nun fai falta na mas que mirar un poco pa enriba y ver los carámbanos colgaos de les roques
como pa que caiga unu y se nos empeinete na cabeza. El color rojizu predomina n'el suelu y en les peredes, nun debemos olvidar que tamos en lo que fue una explotación de mineral de fierru.
El primer lago que encontramos ye el Lago de la Cueva,con un de los munchos teitos que pueblen esta zona
Hasta aquí la cosa marchaba bastante bien, diba dándonos el solín en focicu, aunque el fríu era pistonudu, pero a partir de aquí la cosa ponse pindia de cojones y el que suscribe, que ta fechu más mierda de lo habitual, resopla como un xabalí en celo, la cosa nun marcha na bien por lo que facemos una paradina técnica y sentámonos un poco porqué de lo contrario ya nun doy más pie.
Menos mal que poco más arriba esperanos el segundu de los lagos El Cerveríz, y esti si que ta xielau, muestra de ello ye que hay quien nun se aguanto y
baxó pa facer patinxe artísticu, cualquier día va crecei un rabu y unos cuernos y ya ye cabra del tó.
Yo dende la lejania viendola disfrutar como una verderona, pero ella que ye más lista que el hambre, na más veme el focicu, da por concluida la excursión, así que garramos camín y vamos de vuelta p’al coche poco a poco que el camín resbala.
De la que baxamos entobia tenemos tiempu de facer unes fotos a un par de teitos que tan a la vera la carretera y que tamien sirven de cobiju pa echar una meadina
solo hay testimonio grafico de los teitos, lo otro ye más inti-escatológico.
Como si de la Gramola El Topu se tratara voy tosiendo tol camín hasta el hotel, tengo la garganta fecha polvo y la cabeza “más grande de lo habitual”, ya verás a que voy poneme malu.
Oye fue llegar, dame una ducha y tirame en la cama un pocu y asín sin más empezó a ... Pero hay nenín que pensasti que diba ser to así de fácil, después de la calma llega la tormenta ó tormento con la puta tos que no cesa y con la cabeza pa estallar, así que, LA JOYA, ni corta ni perezosa garra el bolsu y el chaquetón y tirase a la calle a ver si ta la farmacia abierta en esti pueblu fantasma y como nun podía ser de otra forma tamien taba cerrá, que vamos facer un viaxe en balde y a seguir tosiendo.
Como ya ye la hora cenar y la comida tuvo munchu éxitu, y como tampoco hay alternatives, baxamos a damos otru banquete con una sopina mariscu, unos escalopines al cabrales y vuelve pasame lo mesmo que con la comida que nun me acuerdo de que coño tomamos de postre y lo raro ye que acuerdome de que taba cojonudo pero nun de que llera, na lo dicho son los años que nun perdonen.
Va siendo hora dir pa la cama que mañana tenemos planes de facer otra caminata y habrá que descansar un pocu y cual ye la nuestra sorpresa que cuando subimos pa la habitación notamos como tan cayendo unes bolines pequeñes como de granizu, paezme que la cosa nun pinta na bien.
El domingo nun amanez como teníamos previsto, ta nublao, fai un frío de la de su madre y la niebla ta metía en los altos, que vamos facer, lo primero ye desayunar y luego ya veremos.
Del desyunu si me acuerdo pan tostaín, mantega, mermelá y unos sobainos, taba to de puta madre así que dempues de llavar los dientes de ratón, acabar de recoger les coses y de despedimos de la “posadera” cogemos la carretera que desde Pola de Somiedo nos lleva al pueblo de Valle del Lago, son 8 kilómetros de carretera pindia y que a medida que la vamos subiendo la cosa se va complicando, hasta que en una curva nos encontramos con una gran placa de hielo que nos hace desistir de seguir subiendo, otra vez será.
Media vuelta y buscamos otra alternativa, que tampoco cuaja ya que no tenemos muy claro por donde está el inicio de la ruta y sigue chispeando nieve......
Garramos el coche y tomamos dirección al puerto, para ir por esta otra alternativa al Valle, pero la noche anterior hizo mella en las carreteras y nos volvemos a encontrar con grandes placas de nieve-hielo que nos hacen desistir, así que otra media vuelta y ahora ya nos mosqueamos y garramos camín de casa.
Como tenemos ganes de tirar les pates pol monte, cuando pasamos por Belmonte de Miranda paramos a comprar el periódicu y a informanos de que podemos facer y en conclusión, ya que ta todo en obres ó cerrao, lo que nos queda ye acercanos al pueblu de Silviella de donde sale la ruta de La Viña.
Nun se si ye que tamos torcíos ó que pero garramos un camín que sí ye muy guapu, entre bosque, resbala que la puta que lo parió, pero que nun ye la ruta que tabamos buscando, aso sí topamos un colega que ta faciendo un dibuxu d'una piscifactoría y que nos agasaja con un zumo pa qu’el camín se nos faga más llevaeru, tobía me acuerdo de los morrinos que tenia tos rebozaos de naranja, pa comelu vivu. Pues eso, que nun vamos bien y entos damos la vuelta atayando per la Central Eléctrica y la carretera y volvemos al pueblu a ver si comemos, porque comprar pa comer compramos pero nun lo metimos en la mochila, lo dicho hoy tamos despistaos perdios.
Pero como de fame nun vamos morir topamos un buen menú con pote asturiano, unos filetinos, un pocu pescau y postre que nos faen un bien espiritual que ni te cuento.
La verdá ye que el fin de semana fue un poco acidentau, pero con eso y todo pasamoslo bien, luego vino la broquitis, la baja y unos cuantos díes muy jodíu, pero bien cuidau, asín que la conclusión que sacamos ye que mereció la pena y habrá que repetir pa poder ver lo que no pudimos y lo que no topamos..
Hay una canción ahora muy de moda y que nos gusta mucho que dice así:
Tenemos la mala costumbre
de querer a medias,
de no mostrar lo que sentimos
a los que están cerca.
Tenemos la mala costumbre
de perder el tiempo,
buscando tantas metas falsas,
tantos falsos sueños,
Tenemos la mala costumbre
de buscar excusas,
de no desnudar el alma,
de no apreciar lo que en verdad importa.
